Un Llamado a Muerte que Termina en Vida

“Un llamado a muerte, que termina en vida”

1. Nos llama a dar la vida

Juan 15:13

“Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.”

Hebreos 4:15

“Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.”

¿Estamos dispuestos a darlo todo por amor a Cristo y a los demás?

—

2. Nos llama a morir

Colosenses 3:1

“Ya que han sido resucitados a una vida nueva con Cristo, pongan la mira en las verdades del cielo, donde Cristo está sentado en el lugar de honor, a la derecha de Dios.”

Colosenses 3:5-11

—

¿Qué áreas de nuestra vida necesitan morir para que podamos vivir plenamente para Él?

—

3. Nos llama a vivir para Él

Colosenses 3:1

“Ya que han sido resucitados a una vida nueva con Cristo, pongan la mira en las verdades del cielo, donde Cristo está sentado en el lugar de honor, a la derecha de Dios.”

Hebreos 12:2

“Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe…”

Vivir para Cristo significa hacer que nuestras vidas reflejen Su amor y propósito.

Filipenses 1:21-30:

Romanos 14:8-9

⁸ Si vivimos, es para honrar al Señor, y si morimos, es para honrar al Señor. Entonces, tanto si vivimos como si morimos, pertenecemos al Señor. ⁹ Cristo murió y resucitó con este propósito: ser Señor de los vivos y de los muertos.

¿Lo que hacemos cada día está alineado con nuestra identidad en Cristo?

¿Estamos realmente viviendo para Él?

—

Veamos estos ejemplos de los primeros Discípulos

– Pedro:

fue crucificado cabeza abajo en Roma, sintiéndose indigno de morir del mismo modo que su Maestro.

– Andrés:

su hermano, también encontró la muerte en la cruz.

– Santiago:

el hijo de Zebedeo, fue decapitado por orden de Herodes.

– Juan

fue el único que murió de causas naturales, pero no sin sufrir primero por su fe, siendo exiliado por años.

-Esteban:

el primer mártir, fue apedreado por su valiente proclamación de la fe. Su último aliento fue una oración por sus verdugos, reflejando el amor y perdón de Cristo.

-Pablo:

quien antes persiguió a los cristianos, luego entregó todo por el evangelio. Fue encarcelado, azotado y finalmente decapitado en Roma.

—

Jesús nos mostró que no hay amor más grande que el que da la vida por sus amigos (Juan 15:13).

—

Conclusión

1. Dar la vida:

—El amor verdadero se expresa a través del sacrificio.

1. Morir:

—Solo al morir a nosotros mismos podemos resucitar en Cristo.

1. Vivir para Él:

—Nuestra vida debe reflejar el propósito del Maestro.

¿Cómo puedo aplicar estos principios de dar vida, morir al viejo yo, y vivir para Cristo en mi vida diaria?

Solo en Él podemos vivir para Él

Filipenses 2:13

“Porque Dios es el que produce en ustedes lo mismo el querer como el hacer, por su buena voluntad”

Él lo produce en nosotros…